Con la economía española retrocediendo en cifras históricas en los próximos meses, la necesidad de adaptar los negocios al mundo digital se vuelve imperativo. id:61797
La crisis provocada por la COVID-19 ya está teniendo un grave impacto en la economía global y en la de cada uno de los diferentes países. España, uno de los países más afectados en el mundo por la crisis sanitaria y respecto a su mercado laboral, la tasa interanual de desempleo en el país sube un 25,27% y desaparecen miles de pymes y autónomos.
Entidades como la CEOE ya han alertado en sus previsiones económicas actualizadas tras la pandemia de que la necesidad más urgente a corto plazo para minimizar los efectos de la crisis debe ser preservar al máximo la estructura productiva de la economía, es decir, fortaleciendo el tejido empresarial, con especial atención a pymes y autónomos. Que conforman un elevado porcentaje de la estructura productiva española y además son vulnerables ante la situación que estamos viviendo.
Según la escuela de negocios Level UP, la oportunidad digital es uno de los aspectos más importantes en este contexto para los negocios y especialmente para las pymes y autónomos, las empresas más vulnerables en el contexto actual y base de la economía nacional.
Con un consumo cada vez mayor en el mundo online, estas empresas deben digitalizarse. Además de adaptarse a la nueva realidad económica, este cambio aporta otros beneficios, como el hecho de ganar visibilidad y repercusión, la reducción de costes y la mayor eficiencia del negocio.
“Ningún negocio que siga haciendo exactamente lo mismo, que se dirija a los mismos clientes, que no modifique la comunicación, que no modifique los procesos de venta y de consumo, ninguno de ellos va a sobrevivir, tenemos que evolucionar”, explica Carlos Delgado, CEO y fundador de Level UP.
Modernizar el tejido productivo y ser más competitivo para asegurar el crecimiento de las empresas. Para conseguirlo, se debe compatibilizar el enfoque defensivo explicado anteriormente, es decir, la conservación y recuperación del tejido empresarial, con un enfoque más de futuro.
Los modelos de relación digital, que incluyen aspectos como el teletrabajo, el e-commerce, la educación y el ocio a distancia, permiten una mejor gestión de riesgos futuros y estar preparados ante futuras crisis.
Desde la perspectiva de pequeños empresarios y autónomos, Delgado apunta que estos deben olvidarse de los resultados macroeconómicos para centrarse en el día a día de sus negocios: “En tiempos de crisis, muchos negocios caen, pero hay otros que florecen y prosperan porque saben aprovechar la oportunidad que se les presenta”, destaca.
Desde su fundación en 2012, Level UP aplica una novedosa metodología centrada en trabajar las habilidades de los propios emprendedores y autónomos. “A través de nuestra formación buscamos que todos los negocios tengan potencial para ser exitosos, incluso a corto plazo. Las herramientas que ofrecemos en nuestros cursos y formaciones son transversales y de aplicación inmediata en el día a día de la gestión de un negocio, como demuestran los resultados de las empresas que realizan nuestros cursos”, explica Delgado.