Como decimos, el HR-V (Hi-rider Revolutionary Vehicle) actual ofrece una aspecto moderno y sobretodo personal, una herencia que se remonta desde su primera versión que apareció en el mercado en 1999 y se comercializó hasta 2006, en versiones de tres y cinco puertas, y que ofrecía un diseño con líneas más bien rectilíneas, sobre todo la versión de tres puertas completamente distinta a la competencia y luciendo además del característico generoso alerón al final del techo, una enorme ventanilla traerá rectangular. Aunque en algunos mercados asiáticos se utilizaron las iniciales HRV para identificar modelos compactos tipo SUV, no fue hasta 2015 cuando apareció la verdadera segunda generación del modelo, que ofrecía unas líneas completamente opuestas a las de su antecesor, es decir, en lugar de rectilíneas, ahora eran redondeadas, más modernas y aerodinámicas, pero desde luego más anodinas.
Y llegamos el año pasado a la tercera y actual generación del HRV, el SUV compacto de la marca que se sitúa un paso por debajo del más popular CRV. Con esta última generación, el modelo vuelve a marcar una fuerte personalidad en su figura, ofreciendo unos rasgos que le identifican claramente. De entrada, la parrilla esta completamente integrada en el frontal y sus lamas, del mismo color que la carrocería, forman parte del mismo, no como en la casi totalidad de los modelos actuales, como un elemento distintivo aparte. Esa uniformidad colorística delantera, solo se rompe discretamente por tres líneas de color blanco, roja y azul, situadas entre la parte lateral izquierda de las lamas y por el logo central enmarcado en azul.
En la parte baja de paragolpes, se abre la entrada de aire principal, esta vez en el color negro habitual, subraya en su zona más baja, por una lámina de color aluminio. En los extremos de esa mencionada entrada de aire se sitúan los leds de los estrechos faros de orientación lateral, mientras que los principales, desde luego con tecnología full Led, aparecen en la parte más alta del frontal, justo debajo del capó motor. Lateralmente se aprecia claramente la fluidez de sus líneas, tanto que el coche parece más largo de lo que es en realidad, 4,3 m. A ello contribuyen, la forma de la ventilla de la puerta trasera, que acaba en un ángulo que integra la manilla camuflada de la apertura de esa puerta, el color negro con el que esta pintada esta versión, desde la cintura del coche hacia arriba incluyendo el techo y montantes, a excepción del C que recupera el tono de la carrocería en general, la línea rectilínea que recorre el lateral, a la altura de la manilla de apertura de la puerta delantera, desde el final de capó, hasta el inicio de los pilotos traseros y la suave forma hundida, de la parte media baja de las puertas. Por su parte los pasos de rueda están protegidos, como la parte baja de las puertas, por una zona plástica de color negro brillante, que enlaza con las zonas inferiores de ambos paragolpes.
En la trasera toman protagonismo los grupos ópticos, que aunque no son muy grandes, al ser horizontales, ocupan buena parte de esta panel trasero, sobre todo al estar unidos por una fina línea lumínica roja en cuyo centro se sitúa el logo de Honda. Son de tecnología led y aportan una buena identificación nocturna. La inclinada luneta, con su correspondiente visera, que integra la tercera luz de frenado, forma parte de un portón cuya apertura, eléctrica, baja hasta casi la parte negra del paragolpes, con lo cual se facilita mucho las operaciones de carga y descarga. Una zona de color aluminio, a modo de difusor de aire completan esta visión trasera. Son también dignas de destacar las barras que sobresalen a lo largo del negro techo y unas llamativas llantas de cinco radios dobles, caldos en su interior, que facilitan mucho la dispersión del calor de los frenos.
Sin ser especialmente llamativo, el HRV e:HEV, transmite una innegable personalidad y de diferencia claramente de la competencia. Lo mismo se puede decir del interior. No tiene grandes soluciones sofisticadas y llamativas, pero también esta dotado de su personalidad y sobretodo de una practicidad y ergonomía dignas de elogio. El diseño del salpicadero es más bien rectilíneo y ofrece dos tonalidades diferentes, gris oscuro, casi negro y un tono gris claro, casi blanco, en el frontal del mismo, haciendo juego con los montantes, techo, parte de las puertas, apoyabrazos de ellas y el situado entre los asientos, que también en sus laterales tienen el mismo agradable tono y además esta ribeteados por costuras en rojo anaranjado. El centro de los asientos es del gris oscuro dominante en el resto del coche.
El cuadro, de grandes dimensiones, es una pantalla en la que en su parte derecha figura el indicador clásico circular de velocidad, mientras que en el lado izquierdo, también en un círculo, se pueden configurar varias “tandas” de útiles datos, que están en consonancia con el modo de conducción elegido. Entre ambos “círculos”, aparecen los habituales avisadores luminosos sobre el funcionamiento del coche. Por su parte la pantalla táctil multifunción de 9 pulgadas, esta situada de forma sobresaliente en el centro del salpicadero. Es fácil de manejar y los datos que aporta ofrecen una buena resolución, con lo que se facilita la rápida comprensión de los mismos. Además, el tiempo de operación de los controles más usados se ha reducido a menos de la mitad en comparación con el modelo anterior, de manera que se ofrece una experiencia más segura y más ergonómica. Para navegar por la interfaz del sistema, se utilizan las típicas funciones de un smartphone, con controles por deslizamiento para desplazarse por las páginas y las listas. La pantalla se puede configurar para adaptarse a todos los requisitos de uso, ya que incorpora accesos directos personalizables para las funciones de uso frecuente y las fuentes de audio. El completo conjunto de aplicaciones integradas se puede complementar mediante el duplicado de la pantalla del smartphone por medio de las aplicaciones Android Auto (con cable) y Apple CarPlay (a través de Wi-Fi o con cable), esta última con conexión inalámbrica.
La plataforma My Honda, se está revisando exhaustivamente tras los comentarios de los clientes de un HRV, a fin de mejorar la experiencia del usuario y los tiempos de respuesta de la aplicación. Además, Honda ha adoptado el enfoque basado en la conectividad como servicio con actualizaciones inalámbricas (OTA) a fin de garantizar que se puedan compartir otras características de manera más rápida y sencilla. Amigos y familiares pueden disfrutar de las ventajas de My Honda+ una vez que sus datos se han añadido en la aplicación.
Bajo la pantalla se sitúan los mandos del climatizador, por lo que se maneja en “directo” y no hay que buscarle en la pantalla como en otros modelos, lo cual se agradece y evita distracciones inútiles. Como concesión a la creatividad, toda la zona de la consola correspondiente a la bandeja de carga inalámbrica de móviles y la palanca selectora del cambio automático, en esta versión es de color naranja. Tras la mencionada palanca se encuentran dos huecos para botes de bebidas y junto a ellos la pestaña de selección del modo de conducción, la tecla del control de descenso y la del freno de mano electrónico. Los asientos delanteros, de accionamiento manual, disponen en cambio de calefacción, al igual que el volante, pero en ambos casos con un calor un tanto tenue, aunque se seleccione el máximo. Por el contrario, sujetan muy bien el cuerpo y resultan cómodos. Las plazas traseras disponen de un espacio envidiable para las piernas, el HRV es de los SUV compactos con más espacio para ellas. Por la disposición del asiento admite mejor a dos personas que a tres, pero por espacio no plantea ningún agobio el estar ocupados en su totalidad. Se puede abatir en su totalidad o en la proporción 60:40, para así aumentar la capacidad de un maletero que no es muy grande, 320 litros, y llegar hasta los 1.290 litros. Como curiosidad digamos que la banqueta y el respaldo traseros, en la descrita proporción, se puede recoger hacia arriba, quedando verticales, pues debajo del asiento hay mucho espacio, ya que el depósito de gasolina no esta bajo estos asientos como es habitual, sino debajo de los delanteros, con lo cual queda un hueco enorme, tras los asientos delanteros, para transportar equipaje delicado, muy voluminoso en altlura o que no se quiera llevar en el maletero. En general, el aspecto del habitáculo es bueno y agradable y se nota que la mayoría de los elementos empleados son de igualmente buena calidad.
HR-V e:HEV, como única versión hasta ahora, es un híbrido autorrecargable, que consta de un motor de gasolina y dos motores eléctricos, todos ellos situados en la parte delantera transversalmente. El de combustión se trata de un cuatro cilindros de 1.498 c.c., todo de aluminio y ciclo Atkinson, cuya potencia se cifra en 107 CV, entre 6.000 y 6.450 r.p.m. y su par en 131 Nm, entre las 4.500 y 5.000 vueltas. Un motor que a bajas vueltas resulta muy silencioso y suave, pero que cuando se le exige una reacción rápida se vuelve un tanto ruidoso, debido al tipo de cambio de velocidades de pares de engranajes en lugar del cambio automático habitual de doble embrague o similar. Ello comporta que, al no existir las velocidades secuenciales, al exigir una aceleración rápida, el motor sube de vueltas y suena como si estuviera casi al límite de revoluciones y sigue esa alta rumorosidad hasta que se igualan las vueltas con los engranajes de la transmisión. Para paliar en parte esta situación, Honda ha ideado un sistema que hace bajar las revoluciones secuencialmente, como si se estuvieran engranando distintas velocidades como en un cambio normal. También cuando el motor de gasolina suministrando energía al motor eléctrico, se deja oir en demasía para nuestro gusto.
En la parte eléctrica, el e:HEV cuenta con dos motores, uno que genera energía o corriente eléctrica y otro que además de eso impulsa también al vehículo, este dispone de una potencia de 131 CV y un par de 253 Nm, es precisamente la potencia disponible en total, sumando el motor de combustión y el eléctrico. El sistema híbrido empleado consta de tres modos de funcionamiento que se seleccionan automáticamente, sin que el conductor tenga que intervenir. Los modos son Eléctrico, Híbrido y Engine. Siempre que se arranca lo hace en el modo Electrico y si se circula a baja velocidad se seguiría así, ahora bien en cuanto se acelera algo más fuerte, entra en funcionamiento el motor de gasolina, con lo cual estaríamos en el modo Hibrído, pero no para impulsar el vehículo, que seguiría haciéndolo con el motor eléctrico, sino para suministrar energía y mover el generador. En el modo Engine, es el motor de combustión el que impulsa al vehículo, situación más habitual al circular por carretera y solamente entra el funcionamiento el motor eléctrico si la aceleración lo requiere.
De todas formas, existen tres programas de conducción que el conductor puede elegir a voluntad, Normal, Sport y Eco. El modo «Sport» permite una respuesta más rápida y precisa del acelerador, mientras que, por otra parte, el modo «Eco» disminuye la potencia del sistema de aire acondicionado y la respuesta del acelerador, para así favorecer el ahorro del combustible. El modo «Normal», es en el que el automóvil ofrece el máximo equilibrio entre las otras dos opciones y el más habitual de utilización. También es posible ajustar el nivel de retención que proporciona el motor eléctrico utilizando las levas que hay en el volante (existen cuatro niveles) o seleccionando el modo B en la palanca del cambio, que activa directamente el modo de mayor retención, posición ésta muy útil para circular por ciudad, sin necesidad de utilizar las levas, aunque el coche no se para del todo y hay que activar el freno si se quiere detener el coche del todo. Por cierto, a mayor retención, mayor potencia de recarga de la batería.
El HR-V e:HEV, es un coche que resulta muy cómodo y muy fácil de conducir además de transmitir una sensación agradable de seguridad. Colaboran a ello las suspensiones, con McPherson delante, con su barra estabilizadora y rueda tirada con elemento de torsión en el eje trasero. No permiten balanceos excesivos de la carrocería, mientras que asientan muy bien el vehículo a altas velocidades. También hay que señalar que esta tercera generación del HR-V, incorpora distintas modificaciones técnicas, como son el aumento de rigidez en la plataforma, al emplear un mayor porcentaje de acero de alta resistencia, la columna de la dirección incrementa la rigidez torsional en un 15%, con lo que transmite una mayor sensación de suavidad, además de una mejor precisión en los cambios de dirección. Se incorpora el sistema de maniobrabilidad Agile Handling Assist (AHA), que es otra tecnología avanzada que mejora la estabilidad dinámica del coche, especialmente al responder a las interacciones rápidas de la dirección o a cargas elevadas de giro, por ejemplo, durante las maniobras evasivas de emergencia. El sistema AHA se acciona por medio del sistema de control y estabilidad del vehículo (VSA) y aplica una ligera fuerza de frenado a las ruedas interiores al girar el volante.
Los frenos, con discos delanteros delante y macizos atrás no platean el más mínimo problema y además un servofreno eléctrico a la medida del sistema e:HEV controla con suavidad los frenos regenerativos e hidráulicos, lo que permite una sensación de frenada suave y segura. Por último, señalar el abundante número de sistemas de ayuda al conductor, de seguridad y de confort con el que cuenta este personal modelo de Honda.