La dermatitis seborreica es una erupción escamosa común y benigna. Se llama dermatitis porque implica la inflamación de la piel y seborreica porque afecta a zonas ricas en glándulas sebáceas. Por lo tanto, es más común en la cara, el cuero cabelludo y el pecho. Puede afectar a cualquier edad a partir de la pubertad. En los bebés se presenta en una forma conocida como dermatitis seborreica infantil. id:84137
La dermatitis seborreica es más común en los hombres que en las mujeres, lo que se cree que se debe al efecto de los andrógenos en la producción de sebo. La incidencia máxima se da en los bebés, en los adolescentes y en los adultos jóvenes: sin embargo, puede darse a cualquier edad. Se observa en todo el mundo.
Causas de la dermatitis seborreica
La distribución y el aspecto de la dermatitis seborreica suelen ser característicos. La descamación fina (caspa) ayuda a confirmar el diagnóstico. En caso de duda, se puede solicitar un cultivo de hongos en una clínica de tratamiento capilar. Si se sospecha de una enfermedad subyacente pueden ser necesarios análisis de sangre.
La causa exacta de la dermatitis seborreica no está clara, pero probablemente se trate de una reacción inflamatoria a una bacteria llamada Malassezia spp. Esta bacteria puede ser un huésped normal de la piel. Los pacientes con dermatitis seborreica pueden tener una resistencia reducida a la citada bacteria. Los síntomas pueden verse agravados por una enfermedad, el estrés psicológico, la fatiga, el cambio de estación, una función inmunitaria deficiente y determinados medicamentos. Entre ellos se encuentran la buspirona, la clorpromazina, la cimetidina, la griseofulvina, el haloperidol, el litio, el interferón alfa y la metildopa.
Tratamiento y manejo de la dermatitis seborreica
La base del tratamiento es la medicación antifúngica regular con esteroides tópicos intermitentes. No hay pruebas de la superioridad de un antifúngico sobre otro. Los inhibidores de la calcineurina se utilizan cada vez más en esta afección, con pruebas de una eficacia comparable a la de los azoles cuando se usan en la cara y el cuero cabelludo. Los objetivos son mejorar el aspecto de la erupción visible y reducir el picor y el eritema.
Cuero cabelludo: En primer lugar, eliminar las costras o escamas gruesas con aceite de oliva o un preparado queratolítico como el ácido salicílico o el alquitrán de hulla. El aceite de oliva debe dejarse en las zonas afectadas durante varias horas antes de lavarse con un champú normal o de alquitrán de hulla.
Champús medicados: debe utilizarse un champú que contenga ketoconazol al 2% y, como alternativa, un champú de sulfuro de selenio. Si éstos son inaceptables, pueden utilizarse champús que contengan piritiona de zinc, por ejemplo Head & Shoulders®, alquitrán de hulla o ácido salicílico. En el caso de la dermatitis seborreica leve, caspa, es mejor que se anime a los pacientes a tratar su afección con tratamientos de venta libre a largo plazo en lugar de con medicación prescrita. Los champús se utilizan dos veces por semana durante al menos un mes, tras lo cual puede reducirse la frecuencia. También pueden utilizarse en la zona de la barba. Las aplicaciones de esteroides en el cuero cabelludo reducen el picor. El uso intermitente durante algunos días consecutivos puede ser útil; el curso no debe superar las cuatro semanas en total. Evite el uso continuo. Utilice un esteroide tópico potente para el cuero cabelludo pero no en la zona de la barba.