Con motivo del Día de la Internet Segura, Singular Bank ofrece una serie de medidas preventivas para reconocer cuándo se está frente a este tipo de fraude bancario que en los últimos meses ha aumentado exponencialmente. id:68013
La evolución del volumen de pagos realizados con tarjeta en España mantiene una tendencia al alza. Entre 2011 y 2019 aumentó hasta alcanzar la cifra de 210.000 millones de euros, según datos de Statista. Un progreso que se fortaleció durante la pandemia, ya que en 2020 los pagos digitales a través de tarjetas de débito se incrementaron en un 14,29%, según revela el índice Prisma Medios de Pagos.
Este aluvión de transacciones es la panacea para los ciberdelincuentes. En el marco del Día de la Internet Segura, que se celebra este martes 9 de febrero, el primer banco privado independiente de España,
Singular Bank, ofrece las claves para saber cómo evitar ser víctimas del delito conocido como phishing, en el que delincuentes buscan obtener datos confidenciales de una persona determinada. Un fraude que ha aumentado de forma exponencial en los últimos meses.
“Los suplantadores o ciberdelincuentes cada vez encuentran nuevas formas de acceder a los datos del usuario, por lo que debemos ser muy cuidadosos, aunque también las medidas y los protocolos de seguridad de las entidades financieras han evolucionado positivamente para establecer controles cada vez más rigurosos e impedir así este tipo de fraudes”, señala Damián Ruiz, Chief Information Security Officer en Singular Bank (CISO).
El phishing es una técnica que se basa en utilizar un duplicado de una web de confianza para verificar los datos y sustraerlos. No siempre son fáciles de detectar, pero sí que podemos fijarnos en algunos patrones; normalmente, los correos o mensajes con los que se comete este tipo de delitos tienen textos con faltas de ortografía o expresiones extrañas, el dominio del remitente suele ser falso, se invita a hacer clic en un enlace externo o incluso a descargar un fichero adjunto y también se suele solicitar usuario y contraseña. Por ello, para evitar ser víctimas de este fraude bancario debemos: en primer lugar, mantener nuestro navegador lo más actualizado posible, verificar la dirección de correo o el teléfono del remitente, revisar las direcciones de enlace así como la seguridad del sitio web al que enlaza, sospechar de cualquier correo o mensaje que solicite introducir datos bancarios (recuerda que ninguna entidad bancaria te solicitará esta información por mensaje o correo electrónico), no abrir los documentos adjuntos ni hacer clic en los enlaces hacia otras páginas web.
“Es necesario asegurarse de que las páginas son reales y seguras, que cuentan con un candado en el navegador y siguen el protocolo HTTPS antes de la dirección web. También debemos prescindir de hacer transacciones a través de redes Wi-Fi públicas o introducir nuestros datos de pago en aplicaciones o páginas donde no vamos a comprar o que no nos dan total seguridad”, explica el CISO de Singular Bank. “Se desaconseja absolutamente acceder a la página web de nuestro banco desde un link enviado por correo electrónico, dando alguna excusa como la necesidad de actualizar datos o hacer una comprobación rutinaria”.
Además de todas estas precauciones, el sector financiero, consciente del auge del mundo digital, ha realizado una fuerte inversión para fortalecer y potenciar la seguridad informática de sus sistemas y minimizar los riesgos. Aun así, según un análisis de Kaspersky realizado en 2019, un 2% de las transacciones bancarias online fueron realizadas por estafadores y el 16% eran sospechosas, por lo que es imprescindible estar siempre alerta.