www.economiadehoy.es

Brecha de financiación bancaria de pymes europeas

¿Dónde nos encontramos desde que el BCE comenzó su programa de flexibilización cuantitativa?
Ampliar

¿Dónde nos encontramos desde que el BCE comenzó su programa de flexibilización cuantitativa?

jueves 11 de abril de 2019, 12:18h
Entre 2015 y 2018, la demanda de crédito para pymes españolas se redujo gracias a un aumento en la capacidad de autofinanciación, pero a la vez se incrementó la dependencia de los microcréditos. id:44211

La brecha en la financiación bancaria para las pymes de la zona euro se ha reducido considerablemente desde 2015, cuando el Banco Central Europeo (BCE) comenzó con su programa de flexibilización cuantitativa. La brecha mide la diferencia entre la demanda y la oferta de crédito para pymes, es decir, la demanda de crédito no cubierta. En 2018, se estimó en un 3% del PIB (400.000 millones de euros), 3 puntos más baja en comparación con 2015 y, por lo tanto, se acercó, pero se mantuvo más alta que el 2% del PIB de Estados Unidos, donde la financiación corporativa está mucho más diversificada entre el crédito bancario y la financiación del mercado.

Sin embargo, la heterogeneidad entre países persiste. Las brechas de financiación de préstamos bancarios para pymes son más altas en Holanda (22% del PIB), Bélgica (14%) y Francia (9%), donde el crecimiento de la deuda corporativa ha superado a la actividad. Mientras tanto, las pymes en el sur de Europa han ajustado fuertemente la demanda de sus préstamos a la baja debido, principalmente, a que la oferta de crédito no fue a la par.

Las pequeñas y medianas empresas europeas representan más del 99% de todas las empresas europeas no financieras y dependen de los bancos para el 70% de su financiación externa. Además de generar cerca del 60% del valor agregado bruto total, emplean a más de 90 millones de personas.

SOLUNION, la compañía experta en seguros de crédito y de caución y en servicios de gestión del riesgo comercial presenta un nuevo estudio de uno de sus accionistas, Euler Hermes, producido conjuntamente por Euler Hermes EconomicResearch y Euler Hermes Rating. El documento se centra en las pymes como actores críticos de la economía europea y calcula la brecha de financiación de los préstamos bancarios para las pymes de la zona euro en su conjunto y en seis países principales: Alemania, Francia, Italia, España, Países Bajos y Bélgica.

Reduciendo la brecha de financiación bancaria: ¿objetivo alcanzado?

“El programa del BCE hizo que los préstamos fueran más accesibles a través de tasas de interés de más bajas en los préstamos bancarios, pero también gracias a fuentes de financiación no bancarias más altas. Estas medidas dieron como resultado una disminución en la brecha de financiación de las pymes de la zona euro, que ha disminuido del 6% del PIB en 2015 al 3% del PIB en 2018. Este dato acerca la brecha de financiación bancaria de la zona al 2% del PIB de Estados Unidos, pero aún sigue siendo más alta", apunta Kai Gerdes, Jefe de Análisis de Euler Hermes Rating.
Sin embargo, el último informe de Euler Hermes destaca un gran contraste entre los principales países de la zona euro (Alemania, Francia, Bélgica y Países Bajos) y los países del sur de Europa, como Italia y España. La compañía observa un fuerte aumento en la demanda de préstamos en los países centrales, pero una disminución significativa en los países del sur de Europa (-59% en Italia, -45% en España). "Por un lado, esto puede estar relacionado con un crecimiento más tímido en la oferta de crédito por parte de los bancos, pero también con una mayor capacidad de autofinanciación en estos países en comparación con los países centrales de la zona euro", explica Ana Boata, Economista Senior para Europa de Euler Hermes. "Además, el crecimiento de la inversión en los países del sur de Europa ha repuntado más tarde que en el resto de la región, mientras que la financiación de su capital circulante se ha convertido en una restricción más grande y ha aumentado su dependencia del crédito a corto plazo", afirma.

Si bien entre 2015 y 2018 la brecha de financiación de los préstamos bancarios disminuyó a nivel general en la zona euro, en Bélgica y Francia estas brechas se han ampliado y las pymes tienden a tener índices de endeudamiento mucho más altos en comparación con hace tres años. Esto hace que las compañías en estos países sean más vulnerables a una recesión económica, dada su alta dependencia de la deuda para financiar sus inversiones.

La brecha de financiación bancaria debería permanecer estable en el futuro, ya que el BCE adoptó una postura más moderada, sugiriendo que las tasas de interés permanecerían bajas por más tiempo para que la liquidez se mantenga.

Una política monetaria del BCE muy acomodaticia ha generado una mayor dependencia hacia los préstamos bancarios para las pymes europeas, que están altamente endeudadas y dependen de los bancos para el 70% de su financiación externa frente al 40% en Estados Unidos, donde la financiación del mercado juega un papel más importante. Sin embargo, la política monetaria actual del BCE está programada para continuar, al menos, hasta finales de 2020, lo que significa que las tasas de interés deberían permanecer bajas y la liquidez debería mantenerse. A partir de ahora, esta política es crucial para las pymes europeas, ya que cualquier brecha entre la demanda y la oferta de préstamos podría llevar a un menor crecimiento de la inversión, lo que podría ser una restricción para el crecimiento económico general de la zona euro en el futuro.

España: disminución en la demanda de préstamos, pero mayor dependencia de los microcréditos

El retorno sobre el capital (ROE) en Italia y España se ha contraído más que el promedio de la zona euro (-2.1pp), lo que refleja en parte la necesidad de provisionar un alto número de NPLs (préstamos no rentables). Como resultado, desde 2015 las pymes se han vuelto mucho más dependientes de los préstamos más pequeños en los países del sur de Europa. En España, los préstamos muy pequeños (por debajo de 25.000 euros) alcanzaron el 47% del total de nuevos préstamos, en comparación con solo el 10% en Alemania. Además, en Italia y España, la proporción de líneas de crédito, utilizadas para financiar capital circulante, es mayor en comparación con los países centrales de la zona euro y se incrementó aún más en comparación con 2015.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios