Debido al aumento de la población en las ciudades y núcleos urbanos, cada vez es más común vivir en una comunidad de vecinos. Esto se debe en gran parte al éxodo masivo de personas que han dejado las zonas rurales en busca de mejores oportunidades laborales y personales en los centros urbanos. ID: 87440
También es más común que en las comunidades de vecinos surjan numerosos conflictos que, en muchas ocasiones, resultan difíciles de resolver. La razón principal de esto radica en la abundante normativa que regula una comunidad de propietarios, la cual es desconocida para muchos vecinos.
Contratar a un administrador de fincas es altamente recomendable
La administración de fincas se vuelve indispensable en comunidades de vecinos grandes, con más de 20 viviendas, y es totalmente recomendable para aquellas más pequeñas. Las siguientes serían las razones para contar con un administrador de fincas, cuyo rol es cualificado y conlleva una responsabilidad que abarca:
- La resolución de conflictos. Los administradores, al ser una figura externa y objetiva, pueden mediar de forma interna entre vecinos que puedan estar enfrentados debido a diversas razones de convivencia. Los vecinos pueden disfrutar de seguridad y comodidad cuando cuentan con un administrador de fincas en su comunidad. En ausencia de este, el presidente asume las responsabilidades del administrador, siempre y cuando disponga del tiempo necesario (aunque en la mayoría de los casos, el presidente tiene sus propias obligaciones laborales y carece del tiempo suficiente para dedicarse a la comunidad). La presencia de un administrador brinda tranquilidad a los vecinos, quienes pueden despreocuparse de los asuntos comunitarios.
- El mantenimiento del edificio y sus servicios.
- El manejo de las cuentas. La gestión económica óptima es uno de los principales objetivos de un administrador de fincas. Contar con un profesional que tenga conocimientos en áreas como la economía, el derecho y la administración brinda tranquilidad y evita desconfianzas entre vecinos, lo cual puede generar un mal ambiente en la comunidad.
- El control de presupuestos.
- La ejecución de acuerdos adoptados en junta.
- El ahorro de costes para los propietarios es una ventaja importante que ofrece el administrador de fincas. Gracias a su amplio conocimiento y experiencia en el sector, puede encontrar la mejor opción para la comunidad en términos de contratar servicios de reparación, sustitución o mantenimiento. De esta manera, la gestión del administrador se enfoca en rentabilizar y conservar los bienes inmuebles con un criterio profesional y eficiente.
- El administrador de fincas siempre tendrá una opinión objetiva. El administrador de fincas, desde el punto de vista de un especialista, ofrece el punto de vista más objetivo. En una comunidad de propietarios, es sabido que existen relaciones de afinidad entre algunos propietarios, ya sea por vínculos de amistad o familia. Estas relaciones pueden suponer una pérdida de objetividad a la hora de tomar decisiones sobre temas que interesen a la comunidad.
- Contacto con las administraciones públicas. El administrador de fincas se encarga del conocimiento y estudio de subvenciones públicas. Recibe información acerca de las ayudas disponibles para la comunidad.
- Control de la morosidad. En la actualidad, el número de morosos en las comunidades de propietarios está aumentando cada vez más. Por lo tanto, es ventajoso contar con un administrador que tenga conocimientos jurídicos y acreditación legal para controlar esta desagradable situación. En primer lugar, el administrador podrá reclamar extrajudicialmente la deuda al vecino moroso y, si esta vía no tiene éxito, podrá interponer la acción correspondiente ante los tribunales de justicia. Contar con un administrador de fincas que también sea abogado puede ser beneficioso, ya que podrá representar a la comunidad de propietarios en acciones judiciales o presentar demandas en su nombre. Esto permitirá ahorrar costos al evitar contratar un servicio legal externo.
- Evitar multas. Como profesionales, los administradores tienen la capacidad de detectar cuando las cosas no se están haciendo de acuerdo con la normativa vigente, lo que evita multas y sanciones por incumplimiento. En relación a esto, es importante destacar que las multas suelen ser de cuantías muy elevadas, por lo que no vale la pena arriesgarse.