Es el momento de comprar oro y plata físicos

Es de esperar que los bancos centrales de todo el mundo sigan aumentando la cantidad de dinero en circulación: En general, se considera una "buena política" imprimir cantidades cada vez mayores de dinero nuevo como reacción al colapso económico provocado por el confinamiento dictado políticamente. Es muy probable que el aumento de la oferta monetaria haga subir los precios, ya sean los de los bienes de consumo o los de los activos, o una combinación de ambos.

Con la supresión artificial de los tipos de interés en Estados Unidos, los mercados financieros mundiales han perdido su "brújula" más importante. Tratar de evaluar el valor fundamental de, por ejemplo, las acciones, los bonos, los derivados y los bienes inmuebles es como pescar en aguas oscuras o hacer conjeturas a ciegas.

En un escenario así, cabe esperar consecuencias caóticas para los mercados financieros y las economías reales. En este contexto, el atractivo relativo de la posesión de oro y plata aumenta desde el punto de vista del inversor.

El poder adquisitivo del oro y de la plata no puede ser degradado por los bancos centrales que utilizan las máquinas para imprimir. Además, el oro y la plata, a diferencia de los depósitos bancarios y la deuda a corto plazo, no presentan riesgo de impago. Ya es hora de comprar oro y plata físicos.

Los precios siguen siendo atractivos para aquellos que quieran acumular posiciones en oro y plata.